Un 2025 difícil. Repasando la estrategia actual
Una mirada general sobre este arranque de año bañado en sangre y la estrategia por delante
Escribí este post motivado por el email que me mandó un suscriptor de Aconcagua preguntándome cómo anticipé la caída de la bolsa argentina en el post del 10 de enero titulado “Chau Estabilidad Argenta. Hola Caos Brazuca” (click acá para leerlo).
Mi respuesta fue simple: no tengo ni la menor idea.
Por supuesto me encantaría pensar que hubo una decisión precisa y premeditada atrás. Pero la realidad es que intentar hilar fino con el timing es como tirar una moneda al aire. A veces te beneficia, a veces te perjudica.
El problema es que cuando nos beneficia se lo atribuimos a nuestra inteligencia y, cuando nos perjudica, a la mala suerte.
Mark Buchanan en su increíble libro Ubiquity “Why Catastrophes Happen” -podés pedírmelo respondiendo este email- explica su estudio de las crisis económicas, los cracs bursátiles, los terremotos y las avalanchas de una montaña de arena.
Qué carajo tendrá que ver la caída de las bolsas con una avalancha de arena?
Buchanan se basa en conceptos de la física de sistemas complejos como "criticalidad auto-organizada" donde muchos sistemas naturales evolucionan de forma espontánea hacia un estado crítico en el que CUALQUIER mínimo desencadenante puede provocar consecuencias desproporcionadas.
Un ejemplo que me parece excelente en cuanto a lo que nos interesa, el mercado financiero, es entender la criticalidad auto-organizada de una montañita de arena.
Imaginate que vas añadiendo granos de arena, uno por uno, a esta montañita. Al principio crece bastante estable, pero llega un punto en que la pendiente se vuelve tan pronunciada que está al borde del colapso: ese es el concepto de "estado crítico".
El próximo grano que tires puede no hacer nada, causar un deslizamiento poco importante, o desencadenar una avalancha masiva.
Lo interesante es que no podés predecir cuál grano causará la avalancha ni cuán grande será.
Puede parecer un enfoque poco serio para un experto que esté leyendo estas líneas, y de hecho yo mismo pensé que Charlie Munger estaba senil cuando me enteré hace algunos años que a él le fascinaba estudiar las colonias de hormigas como sistemas complejos para entender la sociedad.
Qué estupidez!
Para mi sorpresa, luego me di cuenta que la naturaleza y la física nos ofrecen muchísima sabiduría para entender desde psicosis colectivas hasta catástrofes económicas mejor que muchos programas de escuelas de negocios.
“El secreto de su éxito es que no estudió nada relacionado a finanzas. Imagínense todo lo que no tuvo que desaprender” -Peter Lynch elogiando a su amigo inversor
Quiero hacer énfasis en la montaña de arena, que me parece un buen ejemplo para entender esta dinámica.
No podemos saber cuándo vendrá la avalancha, pero sí podemos identificar si la arena está reposando en un estado crítico, para alejarnos y evitar los problemas.
Y entonces pongamos el foco en lo que sí tenemos control: reconocer atisbos de estado crítico.
Cuando poníamos la lupa en el mercado argentino, encontrábamos que la gran mayoría estaba eufórica y convencida de que venían más subas futuras, que el Merval había subido 13% en sólo los primeros 4 días del año, que la cantidad de comitentes y nuevos ingresantes al mercado era récord mes tras mes, que ya nadie miraba valuaciones ni les interesaba qué precio estaban pagando por lo que compraban.
El flujo se llevaba puesto todo.
A su vez, en el frente internacional veíamos un mundo minado de deuda y desequilibrios fiscales con bolsas batiendo nuevos máximos sin un mísero recaudo o señal de alerta.
Un buen ejemplo de una montaña de arena reposando en estado crítico.
Frente a esto no podés anticipar el cuándo. Pero sí tenés una guía para frenar y decir: no es sano seguir formando parte de esta psicosis colectiva. Me alejo.
En el mercado me gusta mantenerme alejado de donde ocurren las cosas. Buenas y malas.
Se traduce en mirar aburrido desde lejos las innovaciones de Tesla, los sectores calientes donde compite NVDIA, etc, pero también significa mirar desde lejos los problemas cuando estos llegan.
“Después de 25 años comprando y supervisando una gran variedad de negocios, Charlie y yo no hemos aprendido a resolver problemas empresariales difíciles, lo que hemos aprendido es a evitarlos” - Warren Buffett
En el mercado local hoy vemos caídas pronunciadas que llegan hasta el 50% en USD, y comienzo a ver oportunidades interesantes que probablemente desarrolle en un próximo posteo.
Puedo visualizar que entrás semanalmente a repasar la pestaña “Portfolio” por lo que supongo que te sirve y me animás a seguir compartiéndotela. Ahí vas a poder seguir de cerca las nuevas adquisiciones que vengan próximamente. Link:
Por qué la concentración en Geopark, Vale y Nubank?
Geopark es una petrolera colombiana que está expandiéndose en Vaca Muerta. Hoy tiene la mayoría de sus ingresos de Colombia, pero en unos años van a ser principalmente de Argentina.
La tesis la desarrollé extensamente en el último post titulado “Nueva idea: petróleo”
pero acá quiero ir al llano de forma simplificada:
Cuando compro una acción de Geopark estoy pagando una pequeña parcela de tierra con petróleo enterrado abajo. A su vez, esa parcela viene con deuda, asique también estoy haciéndome cargo de una deuda que no es mía. Y el tercer punto, extraerlo entero no es una cuestión de 2 meses, me va a llevar algunos años.
Y lastimosamente envejecemos rápido. El tiempo de sentarse a esperar no es gratis. Esto es, hay que ponerle un precio al tiempo. Si me dan a elegir entre pagarme 100 USD en un año o 90 USD hoy, considero más valiosos los 90 hoy (esto en finanzas se llama traer a valor presente los flujos futuros).
Volvamos a Geopark con estos 3 conceptos:
Yo pago 8 USD por una acción y recibo a cambio el petróleo enterrado. A su vez me encargo de pagar la deuda de la parcela y, como si fuera poco, traigo a valor presente lo que espero ganar los próximos años. A eso le descuento los impuestos. Sobre este número final me quedan 15,3 USD por acción.
Frenemos acá que parece un quilombo y quizás te enredé, pero es muy simple. Se resume en lo siguiente:
Pagamos 8 USD por acción y recibimos a cambio 15,3 USD de valor bajo tierra. Tan simple como eso.
Aún más, esto tomando reservas de petróleo PROBADAS. Pero si tomamos reservas probadas y PROBABLES no recibimos 15,3 USD. Recibimos 27,8 USD.
Y qué tan seguro es? bastante. Pero no una certeza por el simple hecho de que no estamos pesándolo en una balanza. Son ingenieros haciendo cálculos en terreno virgen a 3.000 metros bajo tierra.
Conclusión: el escenario normal es bueno. Y el escenario bueno es super bueno.
Hace algunos días escuchaba al CEO de Phoenix -socio operador de Geopark en VM, es decir, están juntos en el negocio- en el Vaca Muerta Insights 2025 y decía “al principio veíamos la zona norte mucho mejor que la sur, y hoy estamos viendo que la sur puede ser INCLUSO MEJOR que la norte”.
Esto es una confirmación de que, a medida que perforan, van descubriendo que el escenario en términos de reservas de petróleo es aún mejor de lo que esperábamos.
Por el lado de los activos que Geopark tiene en Colombia, en poco más de un año son las elecciones presidenciales. El socialista Gustavo Petro ganó en 2022 con apenas el 50,4% de los votos y en el medio sufrió un desgaste de su imagen no trivial. Creo que las probabilidades de que pierda son altas. Y si no pierde, no cambia nada. Hoy ya está dentro.
Cara gano mucho, cruz pierdo poco.
Con la implicancia de que un cambio de signo político gatilla mucho valor en la pata colombiana. Por qué?
Por lo mismo que si agarro una carnicería en una villa peligrosa y la relocalizo en el centro de la ciudad automáticamente vale el doble. Vende los mismos kg de carne, pero es más valiosa.
El contexto donde opera lo es TODO.
Y con respecto a Vale y Nubank?
Ambas son brasileñas. Por un lado el mismo enfoque de cambio de signo político aplicado a tierra carioca, ya que también son las elecciones presidenciales en poco más de un año y creo que la cuestión Lula da Silva es, también, un escenario de cara gano mucho, cruz pierdo poco.
Por qué?
Brasil es un país muy fuertemente integrado a los flujos de capital. Esto es, si estornuda USA o China, Brasil cae engripado en cama dos semanas. Y eso a su vez lleva dentro de sí el germen de su propia destrucción: te garantiza que sufra la imagen de Lula.
Si Brasil sigue profundizando en sus desequilibrios, la macro empeora y la imagen de Lula cae, se traduce en un mercado que empieza a pagar el cambio.
Y si por alguna cuestión Lula gira a un approach más racional, también sería bueno.
Por eso de fondo soy pacientemente optimista con los activos brasileños.
Yendo puntualmente a Vale, es una productora de mineral de hierro top mundial que produce 328 millones de toneladas anuales y está muy atada a la recuperación de la economía China, que es un consumidor muy importante de acero e infraestructura (con respecto a China quizás te interese leer el post de hace un año “Operando China”).
Actualmente el mineral de hierro y el sector están pasando un momento de estrés que repercute en precios bajos y, siendo que Vale produce y vende este commodity, por supuesto sufre los precios planchados.
La perspectiva histórica del precio del mineral de hiero sugiere que hoy estamos en niveles cercanos a los pisos y no debería ser ilógico ver una recuperación, salvo un shock muy fuerte en las estimaciones de crecimiento de China o del mundo.
Es una certeza? no. Absolutamente toda actividad empresarial es un juego de probabilidades.
Es tomar decisiones en terrenos con mayor o menor incertidumbre, pero incertidumbre al fin.
Pero el mix de macro brasileña riesgosa, signo político hostil y precio del mineral de hierro deprimido son el tipo de tormenta perfecta y clima negativo en el que me gusta comprar.
Por una simple cuestión:
No pueden ser todas malas. Alguna tiene que darse vuelta.
Por el lado del neo-banco Nubank, sigue avanzando a pasos firmes en Brasil, Colombia, México y próximamente en nuevos países ya que crearon las bases de un modelo de negocio sólido y replicable de bajo costo.
Nubank se metió a pescar en la pecera de los anticuados y rudimentarios bancos tradicionales, y también en la de la informalidad. Gente directamente excluida del sistema, sin cuenta bancaria y sin acceso a una tarjeta de crédito.
Similar al exitosísimo modelo de Mercado Pago que acá vos conocés muy bien.
Con cerca del 60% de la población adulta de Brasil pueden empezar a crecer fuera de su negocio bancario lanzando nuevas verticales y servicios/productos dentro de su propia pecera de 114 millones de usuarios. Y sin gastar un peso en publicidad.
Por ejemplo un marketplace al que, por simple efecto red, entraron más de 1 millón de sus propios clientes, una plataforma de viajes y reservas, un servicio de telefonía móvil y telecomunicaciones, y largo etcétera por delante.
Todo ello con un objetivo: aumentar el ingreso por cliente.
El ingreso creció una bestialidad del 60% en el último año y sumaron 20 millones ¡¡20 millones!! de clientes, pasando de 94 a 114 millones.
Y más importante aún, con una tasa de actividad del 83%.
Esto es MUY importante y pretendo ser enfático acá.
La tasa de actividad es importantísima porque no es lo mismos ser una app primordial en tu teléfono, que ser de esas que amagamos en borrar cada 2 semanas.
La diferencia entre ser tu banco principal y ser una billetera virtual de las que tenés olvidadas sin uso, es que el primero se lleva hasta tu último peso, y el segundo no consigue ni 5 minutos de tu atención.
Hoy hay casi un promedio de compra/uso de 4,2 productos de Nu Holdings por cliente activo.
Entraron a competir hace poco tiempo en México y sólo en el último año duplicaron sus clientes a 10 millones. Y siendo que es un país con una población de 130 millones de personas y sólo 12% de penetración de tarjetas de créditos, el potencial es grande.
Los analistas a veces se asustan por la idea de que se esté saturando la población de Brasil y se estanque el ritmo de nuevos usuarios.
Y razonablemente, en algún momento se van a quedar sin brasileños excepto que descubran cómo producir bebés en menos meses.
Pero lo que el mercado quizás pasa por alto es que hay muchos nuevos países por entrar y una base de clientes consolidada a la que venderle NUEVOS productos.
Para tomar un orden de magnitud, hoy Nubank tiene sólo el 3% de los ingresos por servicios financieros de América Latina.
Espacio para crecer hay de sobra.
Más aún cuando todo lo que construyeron lo hicieron casi sin gastos de marketing, con puro efecto boca a boca. Tienen un coste de adquisición por cliente inferior a 5 dólares, mundialmente competitivo.
En definitiva:
Nubank es una máquina de adquisición de clientes que opera a costes ultra bajos y con capacidad de replicarse en nuevos lugares.
Mientras los bancos tradicionales cobran en promedio 40 usd por cliente, Nubank cobra 10. Y sólo en LatAm hay 250 millones de personas aún excluidas del sistema bancario. A nivel mundial, en torno a 4.000 millones.
A ese target apunta Nubank.
Pero no sólo se trata de un negocio bonito. Porque un negocio bonito, comprado caro, es un negocio no tan bonito.
Hoy, después de sufrir una caída de casi 40% en 5 meses, es un negocio bonito y también barato.
Empecé a escribirte con Aconcagua hace ya un año y sentí mucho afecto y cariño del otro lado de la pantalla. También tuve la suerte de conocer a algunos de los lectores que me escriben semanalmente, encontrar sinergias, escuchar y aprender de sus devoluciones y reflexiones.
De los 3.000 suscriptores actuales, más de 2.000 me encontraron a través de mi amigo, Chino de Doble Piso, que tuvo la enorme iniciativa y amabilidad de publicitar Aconcagua en su exitosísima página con más de 12.000 inversores.
En 8 años de amistad con Chino descubrí no sólo a una persona con sabiduría, sino también con mucha generosidad por compartirla. Y creo que sus 12.000 suscriptores también. Mi principal agradecimiento es a él.
Espero que hayas podido disfrutar esta lectura de feriado.
PD: si necesitás el libro que charlamos arriba te comunicás conmigo por este email. Y recordá suscribirte si aún no lo hiciste!
Un abrazo grande
Muy bueno 👏🏼 gracias
Nubabank, excelente compañía bancaria, que ha generado grandes rendimientos en los últimos años